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Cómics
Un trazo que pasa a la inmortalidad: Kim Jung Gi ha muerto a los 47 años

Un paro cardíaco nos arrebató a este legendario artista a una temprana edad.

Gustavo Arismendi / @YorickAllen

Ha sido un año negro para el cómic a nivel mundial. El noveno arte ha despedido a Neal Adams, George Pérez y a Tim Sale con una diferencia de meses, mientras queridos artistas como Carlos Pacheco hace público que fue diagnosticado con ELA.

Ahora, el mundo de la historieta sufre un nuevo golpe, uno devastador, al tener que despedir a un legendario artista que dejó nuestro plano demasiado pronto.

Kim Jung Gi, aclamado artista coreano y prodigio de la ilustración, ha fallecido a los 47 años.

La trágica noticia fue dada a conocer por parte de su familia mediante las redes oficiales del dibujante, revelando que un paro cardíaco terminó con la vida del extraordinario artista cuando se encontraba de camino a la New York Comic Con que se desarrolla este fin de semana en la Gran Manzana.

"Con gran tristeza y con el corazón destrozado informamos del repentino fallecimiento de Kim Jung Gi. Tras finalizar su última actividad en Europa, Jung Gi se dirigió al aeropuerto para volar a Nueva York, donde experimentó dolores en el pecho y fue trasladado a un hospital cercano para ser operado, pero lamentablemente falleció", dice el comunicado fechado el 3 de octubre.

Hyun Jin Kim, renombrado profesor de dibujo y fundador del estudio Superani, se sumó al texto con su despedida a su amigo y colaborador este miércoles.

"Después de haber hecho tanto por nosotros, ahora puedes dejar tus pinceles. Gracias, Jung Gi".

La Galería Daniel Maghen de París, que se encontraba exhibiendo su obra, entregó mayores detalles respecto a los trágicos eventos, confirmando que el fallecimiento del artista tuvo lugar el lunes por la noche en la capital francesa a raíz de un paro cardíaco.

"Su repentina desaparición contrasta con la inmensa felicidad que nos proporcionaba. Nos quedamos sin palabras", expresaron desde el equipo, señalando que, a petición de la familia, la exposición dedicada a Jung Gi permanecerá abierta hasta el 8 de octubre.

Jung Gi era uno de los invitados a la New York Comic Con e iba a estar presente en el Artists Alley de la gigantesca convención.

Reconocido mundialmente por sus intrincados, rápidos y espontáneos dibujos de gran espectacularidad y detalle, sin nada de preparación ni bocetos, el artista tuvo una celebrada carrera que incluye su participación en la revista manwha Young Jump, donde tuvo su primera publicación "Funny Funny", y los dibujos para los seis tomos del manwha "TLT (Tiger the Long Tail).

Junto con las ilustraciones para "Paradise" y "Third Humanity", novelas del autor francés Bernard Werber, también hizo su salto a las grandes editoriales estadounidenses como DC y Marvel, con quienes colaboró principalmente con portadas para títulos como "The Flash" y "Civil War II".

Tan celebrado es su trabajo que incluso posee un Récord Guinness, en la categoría de Ilustración, con el "dibujo más extenso realizado por una persona", y con arte de ojo de pez.

Para concretarlo, el artista trabajó durante unas 20 horas, a lo largo de cuatro días, logrando crear un enorme fresco que representa el "patrimonio vivo de Penang".

Jean-Christophe Caurette, fundador de la editorial Caurette y agente "por accidente" de Jung Gi, a quien conoció en 2012, describía el talento del coreano gracias a un aspecto fundamental del artista: "Kim Jung Gi tiene una memoria increíble".

"Todo lo que ve, es capaz de dibujarlo sin ninguna ayuda visual. Tanto si hace un boceto rápido en la esquina de una mesa como un mural de varios metros de largo, no necesita hacer ningún trabajo de preparación porque todo está dispuesto en su cabeza. Su capacidad para incluir los detalles más infinitesimales con una precisión exquisita deja boquiabierto. Sea cual sea el ángulo, sus ilustraciones son siempre perfectas; su conocimiento de la anatomía humana y animal es increíble", destacaba Caurette.

Hoy, esas creaciones seguirán impactando a todos los que las vayan descubriendo, porque ahora es inmortal. Eterno en su fantástica obra.