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[Reseña] "The Mandalorian" saca aplausos con su final de temporada

¡SIN SPOILERS!

Las apuestas eran altas para lo que sería el final de la segunda temporada de "The Mandalorian" y la verdad en que la serie encabezada por Jon Favreau y Dave Filoni no sólo no decepcionó, sino que superó todas las expectativas.

Sin entrar en el terreno de los spoilers, que desgraciadamente están abundando en las redes a horas del estreno del episodio, lo que hizo el equipo fue realmente sorprendente, pues lograron tocar todas las teclas que hacen de "La Guerra de las Galaxias" el fenómeno que es.

Si no les gustaron las precuelas o la más reciente trilogía, acá será muy, muy difícil que no queden conformes con el resultado. Y más aún, estarán ansiosos por lo que vendrá.

Ya ahondamos en lo que hace a "The Mandalorian" la mejor serie que se encuentra hoy en Disney+, por lo que sentiremos el vacío en las próximas semanas, y los futuros proyectos de "Star Wars" para esta plataforma tendrán un desafío muy complejo para tratar de alcanzar el nivel conseguido hasta ahora.

Más importante, deben brillar con luz propia, sin intentar ser otra "Mandalorian". Eso ya lo estamos viendo y los rincones de esta galaxia muy, muy lejana dan para mucho. Pero eso lo veremos más adelante.

"The Rescue" (El Rescate) fue el cierre del segundo ciclo de la historia protagonizada por "Din Djarin" (Pedro Pascal) y el niño que ahora sabemos se llama "Grogu", aunque cariñosamente seguiremos llamándolo "Baby Yoda".

Tal como lo anticipaba su título, el capítulo se centra en la operación de rescate del pequeño, quien se encuentra en manos de "Moff Gideon", actual portador del "Darksaber".

"Mando" recluta dos nuevos integrantes al equipo, dos personajes que también desean dar pronto con "Moff Gideon" en su búsqueda por recuperar Mandalore, y se lanzan junto "Cara Dune", "Boba Fett" y "Fennec Shand" hacia el crucero imperial del villano. Desde el momento en el que aparecen frente a aquella nave, el capítulo no da pausa, desatando todo lo que nos gusta de "Star Wars", desde combates en el espacio a duelos emocionantes.

Un elemento que hace a este episodio de los mejores que ha entregado la serie es la tensión que genera en el espectador, con la amenaza de los Dark Troopers y las situaciones se van desarrollando que nos llevan a estar al borde del asiento, con el corazón en la mano. Así de impresionante es este capítulo.

Y cuando creíamos que está todo perdido, descubrimos que el llamado fue escuchado y la serie nos regala uno de los momentos más increíbles e inesperados de toda la saga.

La sorpresa es tan grande, con un debut y una acción que nunca se vio en una entrega cinematográfica, que uno termina aplaudiendo con la revelación. La construcción de esta escena es muy inteligente, pues se enfoca en los otros personajes, especialmente "Grogu", quienes ven a la distancia y mediante las cámaras, poco a poco a este misterioso pasajero y cómo entra en combate.

Ludwig Göransson se luce al hacer que la música acompañe el sentimiento de toda la secuencia y su momento clave, además de habernos entregado un ritmo electrónico fantástico cuando se activan los Dark Troopers.

Lo que se consiguió es un verdadero goce para los fanáticos de "Star Wars", tanto nuevos como de toda la vida, lo que se termina elevando aún más con la emotiva escena final.

El momento con el que cierra la temporada es algo que a lo largo de todo el actual ciclo se fue anticipando, donde vemos qué tan fuerte era la conexión entre "Mando" y el pequeño que lo ve como un padre. Sabíamos que esto tenía que ocurrir y lo que vendrá en la tercera temporada será bajo un escenario muy distinto, mucho más grande, especialmente por una serie de eventos que tuvieron lugar en este episodio.

"The Mandalorian" cierra en lo alto su segundo ciclo, conquistando hasta los fanáticos más duros y teniendo muy claro lo que importa acá: la aventura y jamás perder la emoción. Este viaje ha valido la pena hasta ahora, y con creces.

Y no lo olviden, quédense hasta el final de los créditos. Están avisados