Intermitencia y mucha falta de información: El primer día de Apple Pay en Chile
No todo es lo que parece.
Cierto es que Apple Pay ha sido altamente esperado en nuestro país, pero para nada se trata de una revolución en cuanto a los sistemas de pago como lo han querido abordar. Para nada.
Solo para que se hagan una idea, según datos de la propia Transbank, la penetración en Chile de las llamadas billeteras digitales aún no alcanza el veinte por ciento de las transacciones, aunque este número ha permitido que nuestro país sea el que más utiliza este sistema en Latinoamérica, lo que al mismo tiempo hace extrañar más el retraso que tuvo este sistema de pago. Imagínense entonces el pequeño porcentaje de personas que pagará con su iPhone o Apple Watch, bueno, cuando se lo permitan.
Así las cosas, hay que poner la pelota contra el piso y decir que, pese a que los medios hayan hecho una fiesta con esto, la importancia del debut de Apple Pay en Chile no es tal y nuevamente se trata de todo lo que arrastra la marca Apple. Es una opción más, dentro de las que ya existen hace rato, pero de un muy bajo movimiento en cuanto a transacciones.
Ahora bien, en cuanto al estreno en sí, este también ha estado lejos de ser exitoso principalmente por la intermitencia del servicio que hasta la publicación de esta nota aún se mantiene mayormente de dos maneras: Primero, los problemas para enrolar una tarjeta (principalmente de débito) teniendo que intentar hasta cinco veces e incluso probando con bancos sí admitidos y tarjetas que no deberían tener problemas, el mensaje indica que el emisor aún no tiene compatibilidad con el servicio. Y lo segundo, que en los lugares donde sí se ha podido pagar, el proceso se tiene que repetir un par de veces porque el pago simplemente no se realiza.
Lo otro igualmente grave es que los vendedores no tenían idea del pago con Apple Pay y seguro que la compañía de Cupertino dirá que la responsabilidad no es de ellos y todo lo endosará a las entidades bancarias que están dentro de esto, pero lo cierto es que la falta de información es tal (sea de quien sea) que al hacer la prueba de ir a comprar al almacén de la esquina, al que hemos comprado durante años con tarjeta, al solicitar pagar con Apple Pay nos respondieron ¿qué es eso?. Intentamos en un segundo lugar y el resultado fue el mismo.
En tanto, las redes sociales, principalmente Twitter o X como Musk quiere que le digamos, se han llenado de comentarios negativos ante el estreno de esta modalidad de pago, y si bien también existe quienes no tuvieron problemas y alaban la llegada de Apple Pay, no podemos dejar de decir que es una tecnología que existe desde hace varios años y que ya se venía utilizando con mayor fuerza desde la pandemia. ¿Revolución? Ni de cerca.