
Primeras impresiones ROG Xbox Ally en Chile: ASUS cumple, pero Microsoft falla
La nueva consola portátil ROG Xbox Ally ya está en Chile, pero su principal ventaja simplemente no existe en el país.
SuperGeek ya tuvo la oportunidad de probar la ROG Xbox Ally, este computador portátil enfocado en videojuegos que ha estado dando bastante de qué hablar desde su anuncio hace ya unos meses, principalmente por la oportunidad que presenta para los jugadores acceder a títulos triple A en cualquier parte.
Esta nueva variante de ASUS llegó a Chile con potencia de sobra y, sobre el papel, lo tiene todo para convertirse en el dispositivo portátil para videojuegos más potente y llamativo del momento gracias a la alianza entre ASUS y Xbox que se unieron para crear un dispositivo que mezcla lo mejor del PC gaming con el ecosistema Xbox, apostando por Windows 11, una excelente pantalla y un diseño ergonómico que supera a su antecesora.
En este aspecto, nos encontramos con que el sistema de agarre mejoró notablemente pareciendo que efectivamente estamos tomando un mando de Xbox, lo que ayuda en la sensación de seguridad en las manos. Además, ofrece la misma rugosidad que el mando original y eso hace que no sea resbaloso si transpiran las manos.
También cuenta con un botón dedicado de Xbox que permite moverse rápido entre los menús y ahora también se mejoró el proceso para cambiar entre la capa de personalización y Windows 11, lo que te podría permitir de un solo salto jugar o trabajar en el entorno de computador. Porque a no olvidar, la ROG Xbox Ally no es una consola de videojuegos en sí, sino que un PC consolizado, algo que no es ni bueno ni malo.
La experiencia de uso, en términos técnicos, es sobresaliente porque corre títulos exigentes, permite acceso a Steam, Epic Games y otras plataformas, y su autonomía ha mejorado respecto a la generación anterior. El trabajo de ASUS es notable y vuelve a sacarle brillo a su división Republic of Gamers (ROG) demostrando que cuando se trata de jugar, son de los imparables del mercado.
El procesador es un AMD Ryzen Z2 Extreme, que se acompaña de impresionantes 24GB RAM y almacenamiento de 1TB, GPU AMD Radeon y ofrece una pantalla táctil de 7 pulgadas con frecuencia de actualización 120Hz, protección Gorilla Glass Victus y un tiempo de respuesta de 7 milisegundos. Sumen gran cantidad de botones reasignables a través de Armour Crate incluyendo un par hápticos y sonido Dolby Atmos.
Pero hay una ausencia que pesa más que cualquier otra cosa: el juego en la nube de Xbox Game Pass no está disponible oficialmente en Chile y eso cambia por completo el valor de este dispositivo. Y claro, esto es algo que de seguro se saltarán los influencers nacionales que poco quieren ofrecer su trabajo para el usuario y sí solo recibir algo para su propio beneficio. Pero es clave decirlo y que ustedes lo tengan claro.
Si algo define a la ROG Xbox Ally es su promesa de acceso inmediato a cientos de juegos vía Game Pass. Esa es su carta de presentación, su gancho comercial, su ventaja competitiva frente al Steam Deck o la Switch. Sin embargo, en territorio chileno, esa promesa se diluye y no por culpa de ASUS, que ha hecho un trabajo impecable en hardware, sino por una decisión inexplicable de Microsoft que sigue sin habilitar Xbox Cloud Gaming en Chile, a pesar de tener presencia oficial, oficinas locales y una comunidad gamer activa. Y qué decir sobre que nuestro país tiene uno de los mejores, estables, económicos y rápidos internet fijo y móvil de todo el planeta.
No es poco, ya que sin Game Pass el usuario chileno se ve obligado a comprar juegos individualmente, perdiendo el acceso inmediato a títulos como Starfield, Forza Motorsport o Hellblade II, por nombrar solo algunos. Es como vender un auto eléctrico sin acceso a estaciones de carga: el hardware está, pero el servicio que lo hace brillar no.
Y si bien existen otros servicios de juegos en la nube como lo que ofrece NVIDIA GeForce Now, no tiene comparación alguna al Game Pass, ya que en el primero se paga por horas de uso y hay filas virtuales de espera, lo que los convierte en una versión moderna de los cyber café de antaño y así, la inversión no vale la pena.
Esta contradicción deja a ASUS en una posición injusta porque ha cumplido de sobra con traer la consola a Chile, con soporte local y distribución oficial, Pero Microsoft, que debería garantizar el acceso a su servicio estrella, simplemente no ha hecho su parte y eso convierte a la ROG Xbox Ally en una consola que, en Chile, no puede ser plenamente Xbox.
Obviamente, el panorama cambiará radicalmente y seguro también empujará las ventas más allá de lo esperado, cuando el juego en la nube de Game Pass por fin llegue a nuestro país. Mientras, la ROG Xbox Ally X está disponible en la web de ASUS a un precio de $999.990 y también está la versión un poco más recortada que nosotros no probamos a $649.990.