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[Review] Galaxy Tab S10 FE+: La IA lo salva todo

Con una pantalla de 13,1 pulgadas, la Galaxy Tab S10 FE+ se posiciona como una opción más accesible dentro del ecosistema premium de Samsung. Desde el primer contacto, notamos un diseño ya familiar: cuerpo metálico, bordes delgados y apenas 6 mm de grosor, lo que la hace sorprendentemente delgada para su tamaño.

En cuanto a su pantalla, tenemos una LCD de 90 Hz que, si bien no es AMOLED, entrega buena visibilidad con sus 800 nits de brillo y una experiencia cómoda para su uso. Es una pantalla "bien Samsung" que ofrece buenos colores, aunque los marcos podrían haberse refinado más, y considerando el precio, podría ser que el panel se quede algo corto.

Donde esta tablet surcoreana marca grandes diferencias es en las funciones potenciadas por Inteligencia Artificial. Samsung tiene muy bien tomado esto y aquí vuelve a estar presente con la transcripción de notas escritas a mano en tiempo real, resumir documentos, edición de imágenes con un par de toques y hasta recibir sugerencias contextuales en apps nativas. A eso hay que sumar las funciones de traducción de idiomas que entregan resultados excelentes y sin duda aumentan la productividad a la hora de trabajar en ella.

El S-Pen viene incluido y se acopla magnéticamente. Con él, podremos dibujar, anotar y controlar funciones asistidas por IA como la limpieza de fondos o el análisis de texto. Eso sí, la latencia no es tan fluida como en modelos más avanzados, pero no entorpece demasiado. Funciona.

Ojo también con el tamaño de la tablet, ya que si bien es destacable, no es un dispositivo tan cómodo para trabajar si es que no se cuenta con una funda que permita darle un mejor agarre y también usarla de manera horizontal como una laptop. Esta funda no viene en la caja y tendrá que se comprada aparte pensando en sumarle teclado o solo la protección.

En rendimiento, el chip Exynos 1580 con 8 o 12GB de RAM permite movernos con soltura en tareas cotidianas. Sin embargo, al exigirle más, notaremos los límites del procesador, pero si tenemos claro hasta dónde puede llegar, no habrá problemas. De que se puede jugar, se puede, pero en títulos más exigentes la experiencia no será total, por lo que si vieron por ahí en otras publicaciones que está enfocada en los gamers, no caigan en eso porque no es real. El almacenamiento interno, en tanto, parte en 128GB y puede ampliarse hasta 2TB mediante microSD y eso siempre es bueno.

Todo esto funciona con One UI 7 sobre Android 15 y contará con actualizaciones de sistema operativo, lo que nos permitirá tener una tablet con lo último disponible al menos por seis años, algo que se ha convertido en el estándar de Samsung y que sin duda alguna va en directo beneficio del usuario. Aplausos por eso.

La batería de 10.090 mAh rinde todo el día, y gracias a la carga rápida de 45 W, volveremos a estar listos en poco tiempo. Lamentablemente, el fabricante surcoreano también llevó a este segmento su errada decisión de no incluir el cargador en la caja, algo que no sucede con competidores en hardware y que incluso cuestan menos. Además, sin el cargador adecuado no se puede disfrutar de la carga de 45W y eso atenta primero con lo que compramos y, segundo, con el medioambiente al tener que utilizar más energía eléctrica para cargarla.

Así las cosas, si es que eres de los que prefieren la comodidad de su capa de personalización, soporte, su cuidado y funcional ecosistema de la mano de SmartThings y sobre todo las prestaciones en Inteligencia Artificial que ofrece Samsung, esta Galaxy Tab S10 FE+ resultará una buena opción para saltar de una de la categoría inferior, aunque debes saber que en otros fabricantes podrás encontrar algo muy parecido, a un menor precio y con más accesorios.

Lo bueno:

• Funciones de inteligencia artificial que realmente suman en productividad.

• Pantalla grande y brillante, ideal para streaming y multitarea.

• S-Pen incluido, con integración mejorada para apps con IA.

• Diseño delgado y batería rendidora.

Lo malo:

• Panel LCD que no deslumbra.

• Potencia algo justa para tareas exigentes o uso profesional.

• Solo dos altavoces.

• Precio elevado frente a rivales con mejor hardware puro.