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Experiencia de uso iRobot Roomba i7+: Aspirado inteligente superior

Hay dispositivos que no puedes tomarte un par de días para probarlos y entregar tu opinión y uno de ellos son cada vez más comunes aspiradoras robot, esos pequeños discos que se mueven por todas partes con la misión de ir recogiendo los distintos residuos que encuentra a su paso como polvo, migas y cabellos cortos o largos.

En esta oportunidad tuvimos la posibilidad de probar el modelo premium de iRobot, más precisamente la Roomba i7+ que de partida presenta un paquete completo que suma la necesaria estación de carga que a su vez cuenta con vaciado automático, porque esa es la idea, el que el aspirado sea completamente automático, o al menos todo lo que más se pueda, ya que además de ciertas consideraciones, lo único que tenemos que hacer es tomar por nosotros mismos la bolsa y sacudirla.

El proceso lo realiza gracias a un cepillo que se ubica en uno de sus costados y es el que va literalmente sacudiendo todo a su paso. Además de ello, cuenta con unos rodillos de goma que se encargan también de ir dejando todo dentro de este pequeño aparato. Ambos cumplen muy bien su función, pero eso es algo en que nos explayaremos más adelante.

Su uso es sumamente fácil puesto que bastará con conectar la base de carga, dejar la aspiradora ahí por menos de dos horas y luego ya estará lista para realizar su trabajo. Todo se facilita con la aplicación existente tanto para Android como para iOS, la que es muy intuitiva y en todo momento nos va mostrando el trabajo que la Roomba i7+ va realizando. Incluso nos entrega un mapa de su recorrido, el que gracias a la inteligencia artificial se aprende para lograr un trabajo más preciso sobre todo en la optimización de la energía.

Sobre este punto es clave hablar de la autonomía, ya que de nada sirve si se queda sin energía a mitad del trabajo. Aquí podemos decir primero que es bastante rápida para lograr un 100% de batería y luego en trabajo su autonomía sobrepasa sin problemas los 70 minutos, tiempo más que suficiente para aspirar una casa de noventa metros cuadrados. Y si llegase a quedar sin energía, muy obediente y antes de quedar por ahí tirada, se devuelve a la estación de carga para una vez repuesta, dirigirse al mismo lugar donde quedó y continuar su aspirado.

Es importante recalcar en este apartado que gracias a la IA resulta muy cómodo el dejarla programada para que realice el trabajo cuando no estamos en casa y aquí es muy poco probable que al llegar la encuentres tirada en algún lugar sin batería. Eso sí, siempre se debe dejar todo medianamente despejado para que esta Roomba i7+ se mueva con naturalidad ya que pese a que cuenta con varios sensores, en ocasiones igualmente termina chocando con algo, lo que afectará el resultado final de aspirado.

Y una vez termine su recorrido por el hogar, sea completo o por partes según se lo indiquemos, vaciará automáticamente todo el polvo, pelusas, pelo, tierra y lo que sea que haya aspirado a lo largo de su camino. Ese proceso de vaciado si bien es bullicioso, no resulta tanto como el ruido constante de una aspiradora convencional, porque el de la Roomba i7+ es corto y efectivo, tal como un shoot.

¿Cómo nos fue en su uso?

La utilización de este robot aspiradora se realizó en un departamento de 75 metros cuadrados muy normal, con tres dormitorios, dos baños, cocina, loggia y un living comedor. La superficie de mayor existencia fue piso flotante y en menor medida cerámica, esencialmente en cocina, baños y loggia. Además, una alfombra de 1.60x1.20 y otras dos más pequeñas de 85x50. Por razones obvias (el marco del ventanal) no fue posible incluir las dos terrazas.

El escaneado del lugar lo hizo medianamente rápido y es bien certero. Rápidamente logra un circuito de aspirado, el que es eficiente pero no siempre pareciera ser el más adecuado, esto en cuanto a la optimización de los espacios. Fue usual verla pasar más de dos veces por ciertos lugares que a simple vista no tenía necesidad de repetir.

También es importante explicar que pese a toda su inteligencia, igualmente tenemos que darle una ayudita y esto consiste en dejarle despejado el lugar por donde se va a mover. Ojo que esto no es solo por esta «robotina» sino que también porque de este modo obtendremos nuestro hogar más limpio. Y otra cosa importante es explicar que si quieres pasar por detrás de grandes muebles o un sillón, por ejemplo, tendremos que dejarlos separados de la pared para que la Roomba i7+ pueda pasar por ahí. Los cables también resultan un obstáculo y hay que quitarlos.

Un ejemplo para que tengan una idea, en una departamento en el que conviven dos adultos, tres niños y una perra toy, el ciclo de programación de la aspiradora era de día por medio y una vez a la semana se coordinaba su uso más «full» dejando levantadas sillas del comedor y muebles grandes y sillones despegados de la pared. Y pese a ser un recorrido «nuevo» en comparación a lo que hacía usualmente en la semana, el trabajo igualmente resultó óptimo.

Antes de finalizar un comentario a los bordes y rincones, que es algo con lo que «sufren» modelos de otras marcas; en este aspecto la Roomba i7+ simplemente se luce porque es capaz de irse por toda la orilla sacando todo lo que encuentra e incluso más. Para quien tiene mascotas entiende aún más esto y sin duda alabará este aspecto.

Pues bien, en la era de la inteligencia artificial y la expansión de las aspiradoras inteligentes, luego de utilizar esta opción de iRobot queda más que claro que no da lo mismo cualquier modelo y una inversión así de fuerte tiene que ser muy bien analizada, porque sí, si es que algo negativo podemos encontrar en la Roomba i7+ es su precio, que sobrepasa los ochocientos mil pesos chilenos.

Sin embargo, estamos antes un dispositivo que cumple a cabalidad con lo que promete, que utiliza más sensores y mejores accesorios que las demás del mercado y que eso mismo termina entregando un resultado óptimo en cuanto a aspirado inteligente y permite lograr olvidar en gran parte el realizar manualmente este trabajo. Si tienes la opción de ir por una de éstas, a ojos cerrados.